Batora: Lost Haven – El precio de lograr equilibrio – Análisis

A lo largo de los años han habido grandes obras que nos invitan a reflexionar sobre ciertos temas. Libros, películas, videojuegos. Muchos elementos trascienden la propia obra. Hoy hablaremos de una de esas obras, Batora Lost Haven, un juego que estará disponible el 20 de octubre de 2022 en PC (Steam). Lo podremos encontrar además en plataformas cómo PlayStation 4, PlayStation 5, Xbox One, Xbox Series X/S y Nintendo Switch.

Nos encontramos ante un RPG de acción con una importante carga reflexiva y filosófica. Este indie llega gracias al trabajo de Stormind Games, desarrolladora italiana fundada en 2016. Esta empresa es conocida por dos interesantes y perturbadores juegos: Remothered Tormented Fathers y Remothered Broken Porcelain. Por otro lado tenemos a la editora Team17. Muy conocida por obras cómo Blasphemous o Marauders, que hemos analizado en Comunidad en Español.

Huérfana y elegida de los dioses

El juego nos sitúa en un planeta Tierra distópico.  En algún momento antes de los hechos que se narran en el juego hubo algún evento que provocó la destrucción de la mitad del planeta. Millones de muertos, miseria, ruinas. Al principio del juego no se conoce ese evento causante de la destrucción.

Solamente queda la tristeza y la pérdida de los supervivientes. Los jugadores tomarán el papel de una de esas supervivientes, Avril, que junto a su mejor amiga Mila viven en las ruinas de Londres tras el cataclismo. Durante una de sus “expediciones” encuentran una especie de altar consagrado a lo que parecen unas deidades. Estas deidades son el Sol y la Luna. Tras unas cinemáticas Avril se convertirá en la elegida de estas deidades que se autoproclaman “guardianes de la Tierra”.

Al ser elegida, Avril será bendecida con los poderes de ambos dioses. Así comenzaremos un viaje por varios mundos (Gryja, Huav, Mahzdam entre otros) con la promesa de restaurar la Tierra. Sin embargo, muchas cosas no son lo que parecen, la trama se irá complicando con interesantes giros de guión. En estos primeros sucesos podremos encontrar unos breves tutoriales que nos explican las principales mecánicas del juego. A lo largo del juego habrá algunos otros tutoriales puesto que irán apareciendo nuevos elementos o cambios importantes. El juego no es excesivamente largo: unas diez horas si decidimos centrarnos en la trama principal y no dar rodeos de ningún tipo.

Cuerpo y mente

Una de las primeras y principales mecánicas son las dos “naturalezas” de Avril. Por un lado el poder naranja del Sol; un poder que se manifiesta a través de movimientos con una poderosa espada, un brillo anaranjado de Avril y una barra de vida. En teoría esta naturaleza es física. Por otro lado esta el poder de la Luna, de color morado, relacionado con la mente y con ataques a distancia y mayor movilidad que la naturaleza solar física, así cómo su propia barra de vida. Esto queda marcado y representado de manera atractiva visualmente a través de la propia interfaz. Durante la partida podremos ir cambiando entre ambas naturalezas de manera rápida y en cualquier momento.

Durante la partida nos enfrentaremos a distintos tipos de enemigos. Al igual que Avril, hay enemigos que tienen su naturaleza (naranja o morada) lo que nos obligará a usar la misma naturaleza para maximizar el daño. Habrá otros enemigos con ambas naturalezas al igual que Avril por lo que habrá que vencerlos con ambas naturalezas. De hecho incluso los jefes, algunos requerirán que no sólo acabemos con ambas naturalezas, sino varias veces y agotando ambas barras de vida antes de que se recuperen. Las naturalezas son elementos interesantes para el desarrollo del juego.

El Filo Solar y la Magia Lunar

Sin duda un punto a favor en las mecánicas de Batora: Lost Haven. Avril tendrá dos barras de vida. Sin embargo, si cualquiera de las dos se acaba…tocará cargar partida ¿Por qué? Pues porque cómo decía Morfeo en Matrix: “el cuerpo no puede vivir sin la mente” y viceversa. Al margen de la naturaleza que equipemos, los enemigos nos harán daño en la naturaleza que ellos lleven. Afortunadamente podemos esquivar los ataques, lo que nos concede unos breves segundos de inmunidad a su vez si nos alcanza un ataque durante el movimiento de esquivar o justo después.

Cada naturaleza posee varias habilidades, algunas cercanas, otras a distancia o de protección. Desgraciadamente el juego no permite mucha personalización en este punto. El jugador por ejemplo, no puede decidir qué habilidades equipar como en otros RPG. Podemos recuperar vida mediante algunas habilidades, orbes solares y lunares que dejan caer algunos enemigos o algunos cristales diseminados por el mapa.

Avril necesita mucho más para lograr sus objetivos

A pesar del poco grado de personalización, los jugadores de Batora: Lost Haven podrán mejorar a Ávril haciéndola más poderosa ¿Cómo? En primer lugar, avanzando en la historia. Así recibiremos las habilidades, junto a algunos poderes de curación (orbes) e incluso alguna habilidad híbrida (de ambas naturalezas). También mediante las runas: objetos que obtendremos de cofres repartidos por el mapa, de misiones y de mercaderes en distintos asentamientos a cambio de los diversos recursos existentes (cómo las menas o el polvo). Hay tres tipos de runas.

El personaje puede llevar un número limitado de las mismas según los puntos de cada tipo de runa. Algunas de estas runas aumentan los puntos de vida de las barras. También disminuyen el daño o reducen el enfriamiento de las habilidades. Sin embargo, además del límite parte de esas runas “tienen un precio” cómo nos decían en la película Saw II. Ese precio puede ser sacrificar defensa, daño crítico.

La pruebas de Avril

Una parte del juego es un conjunto de pruebas dónde Avri deberá mostrar su destreza para poder superar los desafíos del Sol, la Luna y los mundos. Esas pruebas consisten en una especie de laberintos-puzzles muy interesantes en otra dimensión. De alguna manera recuerdan a las pruebas de maestría de Warframe. Aunque en Batora: Last Haven funcionan a modo de minijuegos (cómo un pinball). Otro acierto aunque en algunos casos se hacen repetitivos.

Cada mundo tiene su propia historia y secretos

Durante nuestra aventura, contaremos con el apoyo de diversos personajes además de Mila. Habrá nativos en los distintos planetas que visitaremos. Personajes que en algunos casos lucharán a nuestro lado. Si son derrotados por el enemigo  tendremos que cargar partida. Con sus propios problemas al igual que sus mundos. Problemas en los que tomaremos parte. De hecho, aquí entra en juego otro de los puntos importantes de Batora: Lost Haven: las decisiones. El juego nos obligará a tomar decisiones. Según esas elecciones nuestro Karma nos acercará más a un elegido “Defensor” o un elegido “Conquistador”.

¿Venimos a salvar o a conquistar?

En teoría el sistema Defensor se acerca más a una empatía con lo que sucede en esos mundos que visitamos. Mientras que el Conquistador es algo más ajeno a esa realidad y más cercano a la tarea encomendada por el Sol y la Luna. No son decisiones sencillas, implican dilemas morales y filosóficos de diversa índole. Son decisiones crudas que conllevan pérdida. 

Sin embargo, el propio juego y algunos de los personajes nos explican que en Batora: Lost Haven no hay malas o buenas decisiones, sino “decisiones y consecuencias“. Insistiendo además en las consecuencias. Una vez más no todo es lo que parece y esas consecuencias pueden ir más allá de lo que se nos explica. A pesar de tener una corta duración, la existencia de varios caminos posibles nos ofrece cierto grado de jugabilidad para poder experimentar qué ocurre al alterar las elecciones. Eso junto a la opción de “Nueva partida +” desbloqueada tras superar por primera vez el juego

En el nombre de Batora

Durante el viaje según vamos descubriendo nuevos mundos, jefes y NPCs iremos recopilando información sobre todo. Igualmente hay unas plantas que nos aportarán más información después de interactuar con ellas. Muchos NPCs hablan pero básicamente son decorativos, otros son mercaderes que nos venden entre otras cosas runas.

Hay un personaje que al principio no parece más que una mera espectadora. Sin embargo es muy importante para la historia y para el juego en general: Batora, la misma que da nombre al juego. Se trata de una bruja en una dimensión aparte de los mundos. Esta bruja recuerda en parte al Oráculo de Matrix: mensajes un tanto confusos que adquieren importancia según transcurre el viaje. Nos venderá runas especiales para Avril. Podremos acceder a ella a través de árboles especiales en cada mundo (con un icono de sombrero en el mapa).

Cruel, pero de singular belleza

Ya hemos hablado de las principales mecánicas de Batora: Last Haven. Es hora de comentar el “paisaje”. Las ilustraciones de las pantallas de carga son auténticas maravillas coloridas que muestran parte del viaje, así cómo la belleza de los mundos. Durante el gameplay y las cinemáticas podemos ver cierta similitud entre series de dibujos animados recientes. Nos transmite cierto aspecto “familiar”. Aunque una vez más se puede ver la crudeza y los dilemas que nos plantea el juego.

Puede que alguna lágrima se nos escape, así cómo que nos llegue al alma. Sin embargo, su calidad es innegable. En cuanto al sonido acompaña lo que nos transmite el juego según los momentos: seriedad, dureza, relajación, simpatía. Acompaña y de manera aceptable aunque no llega a ser un punto fuerte o suficientemente destacable.

Conclusión

Batora: Lost Haven es un buen RPG con fuertes componentes narrativos y filosóficos. Un indie dónde el combate, el deber, el corazón y la mente son muy importantes. Un juego que nos invita a reflexionar y a asumir las consecuencias de las elecciones, unas elecciones que no son blancas o negras, una trama que tampoco lo es. Ya nos lo revelaba Keanu Revees en Matrix Reloaded: “el problema es la elección”. Un juego desgraciadamente corto para la profundidad que esconde. Aunque con cierto grado de rejugabilidad.

Un juego con poca personalización disponible por parte del jugador, aunque con interesantes mecánicas que requiere cierta habilidad y cuidado. Con puzles curiosos y jefes relativamente complicados. Un estilo artístico atractivo aunque de cierta crudeza que contrasta con el aspecto familiar. Con una banda sonora en armonía con el resto de elementos del juego.

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