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El compositor de Doom Eternal acusa al director de Id Software de mentir sobre el fracaso de la banda sonora original

Doom Eternal 1

“Se pilla antes a un mentiroso que a un cojo”

El compositor de Doom Eternal ha acusado al director del estudio de Id Software de mentir sobre su participación en el fracaso de la banda sonora oficial del juego.

La banda sonora se incluyó como parte de la Edición Coleccionista del juego. Prometiendo archivos de audio sin pérdidas y sin compresión con la música del compositor Mick Gordon.

Sin embargo, cuando la banda sonora salió a la venta los jugadores se quejaron de que solo 11 de las 59 pistas habían sido mezcladas por el propio Gordon. Mientras que el resto se había mezclado a partir de fragmentos de música extraídos del juego.

En mayo de 2020, el director del estudio de Id Software, Marty Stratton, publicó un extenso comunicado en Reddit en el que afirmaba que Gordon había retrasado la banda sonora y luego no la había entregado, lo que obligó a Id a conseguir que el diseñador de audio principal del juego compusiera el resto de las pistas.

Tras la tormenta vino una declaración

Sin embargo, en un detallado comunicado publicado hoy en su propia página de Medium, Gordon ha refutado las afirmaciones de Stratton y le acusa no sólo de mentir sobre la situación, sino también de ofrecerle una suma de seis cifras para que guarde silencio al respecto.

Según Gordon, Doom Eternal fue “un proyecto difícil” para componer la banda sonora, porque supuestamente Id le exigía dos niveles de música al mes, a pesar de que la mayor parte del juego aún no existía.

Gordon afirma que los continuos cambios en el desarrollo del juego llevaron a numerosas reescrituras y a la necesidad de desechar continuamente la música presentada. Y que, aunque había propuesto un calendario diferente, Stratton supuestamente criticó su capacidad para realizar el trabajo.

“Rechazó mi creencia de que el calendario actual era defectuoso y sugirió que mi intento de hacer algo al respecto era un signo de incompetencia”, alega Gordon.

“Negándose a aceptar la realidad de la situación, me echó en cara la propuesta y procedió a destrozarme por haber tenido la audacia de plantear la cuestión en primer lugar”.

Gordon también afirma que no se le pagó hasta los ocho meses del proyecto, y que luego no se le volvió a pagar durante otros 11 meses.

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