Los amantes de los juegos de lucha libre, wrestling o como “pressing catch” como lo conocimos muchos de los que crecimos en los 90 viendo este deporte/espectáculo, estamos de enhorabuena porque el estudio japonés Yuke´s (con una enorme experiencia en títulos de este género como los oficiales de la saga WWE, UFC o el divertido WWE SmackDown! vs. Raw), nos traen AEW: Fight Forever, del cual os dejamos este análisis.
Comparado desde casi su anuncio oficial como el nuevo WWF No Mercy, este título deja claro desde el primer momento que sus intenciones son esas, pero con muchos altibajos y que por suerte, al no tomarse en serio en ningún momento más allá de las escenas reales, queda a mucha distancia de aquel legendario título y solo funciona como un tributo a medias.
Os contamos a continuación los motivos
Un juego solo para la élite… o eso dice
Bueno, en realidad para todo el mundo, porque es bastante accesible en todos los aspectos, quizás demasiado accesible y hasta puede pecar de facilón, pero sí que el juego es mucho más directo en cuanto a jugabilidad, respecto a títulos de similares características.
Pero no es oro todo lo que reluce, pues el tutorial se queda muy corto y está mal planteado, para aquellos que nunca antes hubieran tenido contacto con un título de estas características e incluso para los que ya llevamos años jugando, se nos ha hecho confuso a veces.
Algo a lo que tampoco ayuda a que la jugabilidad sea amena, son los constantes fallos de clipping entre personaje y entorno o incluso con otros personajes, donde muchas veces la IA queda en evidencia, principalmente en combates masivos donde muchos luchadores no saben ni por donde les da el aire.
Uno de los principales problemas está con las armas, que en vez de ser algo muy sencillo de usar y ejecutar golpes con dichas armas u objetos, se torna toda una odisea que muchas veces es mejor obviar las armas, hacer uso de los golpes normales y ni defenderse de los ataques del enemigo.
Los arcades de los años 90 basados en el universo WWF estaban mucho mejor planteados en ese aspecto.
Gestiona tu carrera de luchador o desvaría al máximo
El juego no termina de decidirse y nosotros mientras jugábamos AWE: Fight Forever para hacer este análisis, tampoco nos decidíamos respecto a qué hacer o que modos jugar, porque si, hay bastante variedad y algunos de ellos divertidos, como los minijuegos, pero tanto se ha querido abarcar, que no hay nada bien definido y eso es algo que se nota sobre todo, en el modo carrera.
Ni sirve como presentación para esta nueva categoría de lucha libre donde grandes estrellas han llevado su famosa imagen a nivel mundial, ni tampoco sirve como un modo historia para un personaje creado por nosotros (a nuestro modo de ver, con opciones bastantes limitadas), si no que podemos hacer uso de cualquiera de los luchadores y luchadoras disponibles (más de cincuenta si disponemos de la versión elite del juego y el season pass) para participar en este modo.
Modo en el que transcurre lo que viene siendo la presentación oficial de la AWE desde 2019 hasta casi nuestros días, donde siendo una figura de élite, tenemos que comportarnos como tal, dentro y fuera del cuadrilátero.
Esto significa no solo codearnos de forma literal con nuestros rivales, si no también hacer entrevistas, apariciones en público, salir a comer y cenar, conocer las zonas por donde viajemos, participar en divertidos minijuegos y como no, entrenar en el gimnasio.
Controlar las necesidades de nuestro luchador o luchadora es esencial y es lo único que podrá llevarnos al estrellato y convertirnos en la figura más querida u odiada de la AWE.
Toda lucha tiene su recompensa
Obviamente, por cada combate iremos recibiendo dinero y otro tipo de recompensas, como por ejemplo los autógrafos de todo el plantel que forma parte de AWE, algo que se añadirá automáticamente a la ficha de cada personaje donde también encontramos bastante información adicional sobre ellos. Bastante instructivo la verdad.
Pero como en todo juego con recompensas con una moneda por medio, hay una tienda donde invertir dicha moneda del juego y vamos a poder canjearlo por equipamiento no solo para los luchadores que van más allá de accesorios y skins, si no que también para los escenarios y alguna sorpresa más.
Sin duda alguna aún falta mucho contenido por añadir, pero en una tarde haciendo varias peleas con victorias a nuestro favor, podemos “saquear” la tienda sin problemas.
Apartado técnico
Aquí nuevamente parece que no se terminaron por decidir en qué aspecto dar al juego, porque si bien hay momentos que los personajes son casi calcados a su semejante en la realidad, muchos otros son caricaturas, a veces rozando lo grotesco que hacen a uno sentirse confuso y mucho.
Tampoco ayuda que las animaciones, quitando algunas muy personales y características, sean siempre las mismas y todos tengan literalmente, los mismos movimientos.
Movimiento que por cierto, si llegamos a sacarlos de lo que está realizado en conjunto o quizás en captura de movimiento, da unos errores de clipping o desincronía muy graves.
Para un estudio que ha realizado ya unos cuantos títulos de estas características, resulta extraño encontrar tanto problema y error, aunque esperamos que se solucione con un parche día uno o varios en el futuro.
La banda sonora como es de esperar, cumple con los cánones en un juego de este género y los sonidos no sobresalen, pero tampoco se puede pedir mucho más a estas alturas viendo en conjunto el resto.
EL juego se encuentra traducido al español y con voces en inglés, aunque hemos tenido un par de problemas con los textos.
Conclusiones: Un quiero y no puedo que se queda a años luz de ofrecer lo que promete y que está más perdido que Sting sin maquillar – Jose Aguirre “Joshkerr”
