Durante un podcast de Kinda Funny Games Xcast, Phil Spencer, CEO de Xbox, habló sobre el futuro de Xbox como consola. El conductor del podcast le preguntaba al CEO, si consideraba que había dejado de lado la consola por centrarse en PC. Y que si esto afectaba a su “competición” contra PlayStation y Nintendo.
En respuesta, Spencer dijo que Xbox y Microsoft, siguen una estrategia de mercado diferente a las otras compañías. Xbox no espera superar a los grandes titanes, como son PlayStation y Nintendo en la venta de consolas, no es la meta final de la empresa. Para Xbox, es mucho más importante centrarse en la variedad de juegos y en que estos puedan jugarse en cualquier pantalla, llegando de esa manera a más jugadores.
Spencer afirmó durante el podcast, que la idea de “invertir en juegos más grandes, les haría dar un cambio a favor sobre las compañías rivales”, es una mentira. El CEO también afirma que, de alguna forma, perdieron esa batalla contra las compañías niponas durante la generación de la Xbox One. En esa generación, los usuarios se hicieron con una biblioteca digital muy consolidada con sus juegos preferidos para PlayStation 4. Xbox One salió al mercado sin un buen catálogo de juegos que respaldara su lanzamiento, lo que influyó en las malas ventas. Durante esa misma generación, Nintendo sacó su Nintendo Switch y Sony, su PlayStation 4 Pro. Ambas, se consolidaron al instante como titanes en la industria de las consolas.
Es por este motivo que Spencer afirma que el camino a seguir para Xbox, es centrarse en que haya una amplia variedad de juegos, que se puedan disfrutar en cualquier pantalla. En vez de centrarse en una competencia ya perdida o en invertir en juegos enormes y llamativos, que solo supondrían un gasto. ¿Por qué? Porque los juegos actuales son multigeneracionales y tienen mucha longevidad.
Esta es la primera generación donde grandes juegos como Fortnite, Roblox o Minecraft, están disponibles de generación a generación. Muchos expertos desearían volver a los cartuchos, donde cada nueva generación era una pizarra en blanco. Pero ese ya no es el mundo en el que vivimos.
Ahora vivimos en un mundo, donde el 90% de los consumidores ya poseen alguna consola y su ecosistema de juegos vive entorno a esa consola. Es por ese motivo, que es difícil que un usuario compre una nueva consola, solo por uno o dos juegos grandes que se oferten en ella. Los jugadores prefieren continuidad y variedad, antes que grandeza.