Los videojuegos además de un entretenimiento lúdico que muchos medios ajenos al sector han tachado muchas veces de cosas que no vamos a mencionar, porque no es el caso, también están pensados como un ejercicio de agilidad mental, autoayuda y para mostrar o hacerse eco de ciertas enfermedades, como es en este caso con Inner Ashes y el Alzheimer, enfermedad que toca muy de cerca a quien escribe este análisis.
Para aquellos que aún no sepan que tipo de enfermedad es el Alzheimer, tal y como se cita en muchos lugares se trata de “una enfermedad neurodegenerativa, producto de un proceso de neurodegeneración y que se manifiesta como deterioro cognitivo y trastornos conductuales”.
El estudio español Calathea Studios, junto a PSTalents y Selecta Play han conseguido mostrar con Inner Ashes lo que vive una persona con Alzheimer, sus hábitos, los trastornos y problemas que conlleva tener esta enfermedad y también como afecta a familiares, amigos y compañeros de trabajo, todo ello de una forma tan bella, como emotiva y sin olvidarse de concienciarnos e instruirnos sobre la enfermedad.
En Comuesp tuvimos la suerte de poder asistir a su presentación y agradecemos nuevamente la invitación.
El confuso día a día de una persona con Alzheimer
Inner Ashes nos pone, más que en la piel, en la mente de un guarda forestal diagnosticado con Alzheimer precoz llamado Henry, que día tras día verá como sus recuerdos se van apagando y entremezclan, mientras trata de entender que pasó entre él y su hija Enid para que exista el distanciamiento que tienen ambos.
Iremos conociendo la historia mientras pasa el tiempo de una forma bastante confusa entre realidad y una forma onírica mientras vamos consultando un libro de ilustraciones creado por Enid en la que los recuerdos cobrarán vida e irán aclarando parcialmente la desfragmentada mente de Henry.
Mientras que en el hogar de nuestro protagonista vamos a ir viendo como con ayuda de muchos post-it (como ocurre en la realidad) o una pizarra con muchas anotaciones y recordatorios, servirán para no perder ciertos hábitos o simplemente saber como preparar un café, en el interior de la mente de Henry viajaremos por desiertos, bosques, montañas nevadas, extrañas selvas y retorcidos lugares con zonas brillantes que literalmente nos dejarán en blanco y que todos ellos, no dejan de ser representaciones de algunos sucesos que tuvo con su hija.
No vamos a entrar en spoilers, queremos que disfrutéis de la emotiva historia, de lo ocurrido desde que Enid era niña, hasta ahora que es una mujer que Henry casi no puede reconocer. Porque así también aprenderéis muchas cosas sobre el Alzheimer, consejos, hábitos y más cosas que los desarrolladores han tenido a bien incluir en el juego.
Construyendo recuerdos pieza a pieza y paso a paso
Realmente a paso lento y bastantes piezas, porque hay momentos que este título busca que sintamos la lentitud y como casi se para el tiempo, como le ocurre a muchas personas con Alzheimer, que puede llegar a parecer un Walking Simulator, pero es simplemente para que nos tomemos con calma es buscar recuerdos en forma de cubos desfragmentados y que sirven para coleccionables que resultan ser dibujos de Enid (y que veremos como evoluciona su arte), distintas cartas sobre la historia y consejos o información sobre el Alzheimer. Esto último como ya hemos dicho, muy instructivo.
Entre tanto caminar y recolectar (tranquilos, es todo muy intuitivo y no se hace pesado), llegamos a unos puzles que sin tener mucha complicación, nos llevarán directamente a unas puertas hacia nuestro interior. Bueno, el de la mente de Henry, mientras seguimos un orbe luminoso y flotante que representa a la flor favorita de la madre de Enid, la miosotis o como mejor conocida como “Nomeolvides”.
Una vez entrados en el interior de la mente de nuestro protagonista, encontraremos un puzle similar a lo que sería un Tangram (en este caso con piezas con formas similares a las de Tetris), que a la vez en la vida real, funciona como un ejercicio que suele formar parte del tratamiento de estimulación cognitiva.
Cada vez que finalicemos uno de estos puzles, terminaremos uno de los ocho capítulos que tiene en total Inner Ashes, que con cierta calma, buscando todos los coleccionables y ejecutando todas las tareas (como limpiar el polvo, ponernos un café o tallar madera hasta que no sepamos para que sirve el trozo de madera que vemos), el juego puede llegar a durarnos unas cuatro horas largas, pero vaya montaña rusa de emociones durante esas cuatro horas.
Personalmente jugar Inner Ashes y hacer su análisis, nos ha hecho soltar unas cuantas lágrimas.
Apartado técnico
Con un alarde gráfico, sobre todo en los escenarios oníricos, un diseño artístico soberbio que se nota como refleja una mente que va perdiendo recuerdos, representa recuerdos difusos y otros aspectos, el juego es donde más brilla, aunque al menos en PC, unos ajustes gráficos extra para evitar cierta caídas de frames, hubieran venido de lujo.
En cuanto a el sonido, volvemos a sentir el cariño y mimo en este título, con un doblaje al español excelso, que transmite emociones en cada uno de los actores de doblaje y todo enfatizado por unas melodías y temas que te traspasan el corazón, sobre todo en ciertos instantes.
El control y jugabilidad con nuestro protagonista es sencillo, a la vez que algo tosco y por momentos excesivamente lento, pero todo forma parte de la sensación de confusión.
Conclusiones: Instructivo a la vez que emotivo, aunque algo corto, donde se crea conciencia sobre la enfermedad del Alzheimer de una bonita manera con una historia muy real y que afecta a muchas personas cada día. – Jose Aguirre “Joshkerr”